Los beneficios del ‘team building’ deportivo
Mens sana in corpore sano es una expresión en latín que sigue estando en vigor y que debe convertirse en una de nuestras frases de cabecera. Una mente sana se asocia a un cuerpo sano, y viceversa, por lo que el deporte y los hábitos saludables son fundamentales para cada persona, también en el entorno laboral.
Para ello, cada vez más compañías se apuntan a hacer equipo a través de iniciativas de team building, que aportan numerosos beneficios físicos y también de rendimiento en equipo.
Uno de los grandes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) es conseguir la salud y el bienestar de las personas y según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año se podrían evitar entre cuatro y cinco millones de muertes si fuésemos todos más activos. Y, obviamente, trabajadores ‘fit’ refuezan empresas ‘fit’.
En esta línea, surge el concepto team building, que podríamos definir como las actividades que ayudan a mejorar las relaciones laborales, haciendo equipo y fomentando la cultura corporativa. Asimismo, estas actividades relacionadas con el deporte y el ocio se suelen realizar fuera del horario laboral.
Las actividades más frecuentes que se suelen organizar son:
- Deportivas, como la práctica de algún deporte de equipo, senderismo o actividades acuáticas.
- Voluntariado, fomentando la RSC con el compromiso de los trabajadores.
- Viajes y visitas, aunque sean de corta duración, para reforzar equipos y mejorar la comunicación entre compañeros.
- Juegos de habilidad o escape rooms, para trabajar la negociación, comunicación y liderazgo.
Las ventajas del team building deportivo
Organizar jornadas de convivencia y deporte cuentan con numerosas ventajas, como aumentar la motivación y las experiencias, mejorar la comunicación entre compañeros y fomentar una actitud positiva dentro de la compañía. En definitiva, se crean empleados más felices, tal y como te explicamos en este post sobre el salario emocional.
Ventajas emocionales
Los beneficios se multiplicarán tanto para la persona que practica deporte como para la compañía y además de las mejoras físicas, también destacan las emocionales al reducir el estrés y la ansiedad. Asimismo, el ejercicio mejora la concentración y aumenta la autoestima.
El deporte produce endorfinas, una hormona que genera gran sensación de bienestar y que aleja los pensamientos negativos, lo que se traduce en trabajadores más motivados y positivos, lo que mejora el rendimiento y la creatividad.
¿Cómo se plasma dentro de la empresa?
Los empleados en buena forma física son más optimistas, creativos y rinden más y mejor, por lo que muchas compañías ofrecen servicios relacionados con el deporte dentro de su “cartera” de ventajas corporativas, como espacios para practicarlo, actividades periódicas o descuentos y bonos para centros o gimnasios. Veamos cómo se traduce este beneficio dentro de la organización:
- Atrae y retiene talento. Si una compañía ofrece actividades lúdicas o deportivas, conseguirá que los empleados estén contentos y apuesten por permanecer en ella.
- Reduce el absentismo. Los empleados se sentirán bien física y mentalmente, por lo que cogerán menos bajas.
- Resuelve conflictos. El deporte es competitividad, pero también es negociación y espíritu de equipo, por lo que mejora el clima laboral y ayuda a solucionar problemas.
- Cohesiona equipos. Los deportes, sobre todo los colectivos, fomentan valores de compañerismo y colaboración que redundan en el beneficio de la empresa.
- Hace marca. Relacionado con los puntos anteriores, fomentar la práctica deportiva dentro de una compañía refuerza el sentimiento de pertenencia o employer branding.
Por lo tanto, incorporar el deporte al trabajo es fundamental para potenciar TU compañía, la cultura de empresa y la captación y retención de talento. ¡Adelante!